Alegoría a la humildad
(poema dedicado a la figura de  Buda)

No han llegado aun golondrinas a tus brazos, 
ni el viento,
ni la brisa del solsticio veraniego embriaga el tapiz austero de tu
*(cuerpo…)

La voz del agua,
no sacude aun tu acústico universo de selvático presidio,
no he visto su paso penitente abrazando tus legendarios pies.
Mas ella, en cada destello renacido soñará con ser cascada libertaria,
*(lago y manantial.)

El eco no silencia tu madurez dormida,
no reviste consonantes con su léxico atavío,
no modela,
no intimida la corteza de tu piel,
aun no talla en su profundo paraíso
el canto redundado de los seres
*(sonoros.)

Flora multicolor,
verdegal espectro,
perpetuidad caduca de humedades inconclusas,
musgo cadencioso,
maestro del sigilo,
íntimo boscaje somero de su piel,
aun no ejecutas tu balada 
generosa en sus designios milenarios
*(protegidos.)

Penumbra insustancial,
umbría que cae hacia los cielos, 
minúsculo eclipse repleto de arco iris muertos,
sobre la inmensidad terrestre,
tus efímeros reinos de tinieblas
no han nacido aun de su espigada silueta.
*(por los tiempos.)

La lluvia no desciende lentamente
por tu sabia efigie,
desde la luna, reflejos venideros
no penetran en tu alma tácita de vida,
las noches no fecundan auroras en tu nombre y
*(no sucumben.)

porque aun no eres,
porque aun no existes…
suave partícula de esencia cristalina,
llega la hora de romper la inquieta calma de tu sueño mortecino,
y aflorar la perpetua vida que en ti preexiste
*(ante el dolor.)

El don de la sabiduría se siembra con amor,
 la soledad y su puro entendimiento
es raudo camino hacia la luz eterna,
acrecienta tus raíces por jardines de bondad,
séquito de madre gea,
solitaria compañía,
la verdad subyace al alma en perfecta armonía.

*(se sumergen avezados)
en fragancias,
en toda esencia,
en cada ser,
en cada oleada de viento matutino
tu corazón,
y su dicha,
platónico amor del egoísmo,
tu transparencia se viste
con suspiros de seda.

*(como un sol desfallecido)
mis manos lloran al dejarte…
primogénita de la sabiduría
profundo privilegio de los mansos,
tesoro recóndito y sencillo del alma.

*(en el horizonte infinito)
la tierra te espera con el corazón abierto,
semilla divina del Bodhi,
árbol de la vida,
en gracia divina no han escrito aun los poetas
*(de tu amor.)

“Al cobijo de tu sombra vivirá el iluminado,
ocho senderos de cercanos entresijos,
sembrarán sobre su piel el loto perfumado,
despojando de sus ropas el deseo advenedizo.

Cuatro verdades un camino,
 la noble compasión será su única verdad,
elevándose al nirvana con fervor de un bello sino,
 reencarnado eternamente en tus frutos de humildad.."

 

*Tu cuerpo…
Lago y manantial sonoros.
Protegidos por los tiempos,
no sucumben ante el dolor,
se sumergen avezados como un sol desfallecido,
en el horizonte infinito,
de tu amor.